O-KAERI NASAI

maikos tadaima -en casa-Coches de ocasionanunciosjuegosTest de VelocidadLetras de cancionesCompra y venta de pisosOfertas de Trabajo

sábado, 8 de agosto de 2009

TSUKAHARA BOKUDEN



Hiru fukaku kusa
Fukaku hebi ni nomareru
Kaeru no koe



Avanzado el mediodía
En lo profundo de la hierba
La voz de una rana
Tragada por la serpiente






Despuntaba el alba cuando el ronin escondió su compañera de acero bajo sus ropas, ocultándola a la brillante luz del sol delatadora de su condición. En silencio, recogió el remo que conduciría a la barcaza y a sus diversos viajeros al destino rígido, terminal y monótono que dictaba el lago Biwa, eterno en su quietud, pausado y sin retorno, o, en el más común de los casos, en un retorno equivocado y sin sentido, en círculo sin vuelta atrás.

El orgulloso viajero del Norte, se jactaba inoportunamente de su destreza con la espada, molestando a todo aquel que tuvo el infortunio de compartir espacio e inclemencias con el forastero venido de no sé sabe dónde, fanfarrón y prepotente, fuera de lugar y tiempo, en aquel lago sereno y oscuro, símbolo de paz y tranquilidad, como el remero que guiaba el rumbo de la barca.

El ronin permanecía impasible, escuchando las imposibles historias de aquel engreído y petulante imitación de un guerrero samurái, sus ojos velados por su sucio y raído sombrero de paja de laborioso trabajador de los campos de arroz mercenarios, en los que dejó parte de su vida y sus lágrimas, cuestión de supervivencia en una vida vacía y sin futuro.
Escuchaba al forastero con una media sonrisa en sus labios.

Las gentes de la barcaza, ansiosas de salir por unos instantes de sus monótonas y aburridas vidas, reían sin cesar las bravuconadas de aquella mala imitación de soldado-guerrero valentón e insulso que provocaba risas histéricas y artificiales, risas que escondían la incredulidad de las historias que desgranaban los mentirosos labios del supuesto samurái.

Todos reían, menos el ronin de sombrero de paja raído calado en sus ojos...

El forastero percibió la media sonrisa irónica del guía de la barcaza y se dirigió a él, enfadado, retador, deseando pelear sin sentido, solo por orgullo de petimetre, hablándole con aire triunfal, exigiendo saber el por qué de su media sonrisa, si era guerrero, cuál su escuela y su técnica maestra.

El ronin alzó su sombrero de paja raído y, sin abandonar su media sonrisa le habló serenamente, con voz suave y envolvente.
Le habló de su vida errante, sin dueño, solo siervo de la Justicia, del más débil, siguiendo un camino marcado por el hombre y las estrellas, del amor no correspondido y del aire puro del Universo.

Soy guerrero, respondió.
Mi escuela es el Mundo.
Mi técnica, la de la no-espada.

El forastero del Norte se revolvió al escuchar sus palabras y preguntó a aquel soldado sin rey qué era la técnica de la no-espada, técnica imposible puesto que no existía guerrero si no existía un arma que lo acompañase.

El viejo samurái errante propuso enseñar su técnica al engreído hombretón una vez llegaran a la orilla opuesta del lago Biwa.
Una vez allí, y cuando todos los ocupantes hubieron desembarcado, el ronin y el forastero subieron solos a la barca.
Atravesaron el lago una vez más y el antiguo guerrero hizo desembarcar al hombre orgulloso de sus supuestas hazañas, indicándole que buscara un terreno idóneo para batirse en duelo.

El hombre se adentró unos metros tierra adentro, los suficientes para que el ronin se alejara de la orilla, al tiempo que le decía:

"Esta es la técnica de la no-espada".

Y siguió remando hacia el otro lado del lago...


RONIN : Antiguo samurái que ha perdido a su Señor y se ha convertido en mercenario o vagabundo errante.
BIWA : Lago de la isla japonesa Honshû.
SAMURÁI : Soldado al servicio de un señor feudal.



Nota de la autora: Este relato es una versión libre de una auténtica leyenda japonesa, la leyenda de Tsukahara Bokuden, samurái que existió realmente (1490-1571), y que se convirtió en Ronin (guerrero errante) y fue monje Zen, viajando por todo Japón y enseñando su sabiduría. La leyenda de la no-espada se conoce también como "vencer sin desenvainar", y alude al hecho de que no es necesaria la fuerza sino la inteligencia para vencer a los enemigos.

Este relato es propiedad de su autora y está protegido.

5 Hablan los Danna:

Anónimo dijo...

Interesantísimo. Fantástico. Me gusta.

Sidel dijo...

Hola Carolina, perdona por tardar tanto en comentar, he estado fuera y sin internet, pero he hechado de menos tus relatos, estaba deseando volver a tu blog para encontrar nuevos textos y no me has defraudado como siempre. Una historia sencilla pero con una moraleja potente, sobretodo viniendo de un hombre que fue guerrero.
La vida le ha enseñado un nuevo camino que personalmente me gustaría que se aplicara muchas veces en la vida real. Estupendo! Voy al próximo. Besos

Ferzvladimir dijo...

Quiero hacer un futuro post.

Dejame copiar el texto con tu permiso o linkearlo en mi blog por favor :)

Carolina Márquez dijo...

El texto es un relato de mi propiedad y está protegido por el registro de propiedad intelectual.
Puedes enlazarlo a tu blog mencionando la autoría.
Cuando lo tengas, envíame el link por favor.

Gracias

Ferzvladimir dijo...

Gracias a usted. Cuando tenga el post listo le paso el link por aquí.

Gracias de nuevo.