
Shi o mae niSuzushi kaze
Ante la muerte
El frescor del viento
No podían esperar más.
El tiempo apremiaba y debían dejar zanjado el asunto antes del amanecer. El prisionero estaba preparado para asumir su destino con todas las consecuencias y todos lo sabían, absolutamente todos. Únicamente bastaba la decisión del filo cortante de un tantô y la sentencia de una katana para poner fin...